La parte baja de la espalda está formada por huesos llamados vértebras que están separadas por tejidos fibrocartilaginosos que proporcionan amortiguación, llamados discos intervertebrales. Dos vértebras juntas forman articulaciones llamadas articulaciones facetarias, que guían el movimiento de la columna vertebral.
Las vértebras también están conectadas por fuertes tejidos llamados ligamentos para ayudar a proporcionar estabilidad y proteger la médula espinal. Los nervios viajan desde la médula espinal y suministran a los músculos y a la sensibilidad de la parte inferior del cuerpo. Por último, aunque no se muestra en la imagen, hay muchos músculos que se unen a las vértebras para ayudar a proporcionar estabilidad así como para ayudar a la columna vertebral a moverse. Todas estas estructuras están estrechamente relacionadas e interactúan entre sí para permitir el movimiento y el funcionamiento adecuados de la parte baja de la espalda y la parte inferior del cuerpo. A menudo puede haber problemas o cambios en estas estructuras que pueden llevar a cualquiera de los tipos de dolor de espalda baja mencionados anteriormente.
Entre los problemas más comunes se incluyen:
Traumatismos – Algo como una lesión deportiva o un accidente automovilístico puede causar daños en cualquiera de estas estructuras y puede provocar dolor de espalda.
Envejecimiento natural/degeneración – Con el tiempo, a medida que usamos nuestros cuerpos, el desgaste de estas estructuras puede conducir a cambios en su integridad y funcionamiento y puede causar dolor.
Desequilibrios musculares y articulares – Esto puede ser una causa o una consecuencia de un problema de espalda baja. Los cambios en el movimiento de las articulaciones o los cambios en la fuerza y la flexibilidad de los músculos pueden contribuir al dolor de la espalda baja.
Deformidad – La estructura de la columna vertebral puede ser cambiada desde el nacimiento, lo que puede cambiar el funcionamiento en la parte baja de la espalda y provocar dolor.
Otros (menos comunes) – Como se mencionó anteriormente, otros problemas como infecciones, tumores o enfermedades también pueden causar dolor en la parte baja de la espalda.
¿Cómo puede ayudar un fisioterapeuta?
Como proveedores de atención primaria, los fisioterapeutas de fisioterapia Clinic pueden ayudar si usted está experimentando cualquiera de los síntomas mencionados anteriormente u otros problemas de la zona lumbar. Un fisioterapeuta puede llevar a cabo una evaluación exhaustiva que le permita determinar la causa probable de la lumbalgia y los síntomas asociados.
Al determinar la causa del dolor lumbar, un fisioterapeuta puede ayudar a tratar la causa y los síntomas asociados a través de diferentes técnicas como:
- Terapia manual
- Ejercicio
- Modalidades
- Acupuntura
- Estimulación intramuscular (IMS)
Además, un fisioterapeuta podrá hacer las remisiones o recomendaciones apropiadas para investigaciones y tratamientos ulteriores, como la obtención de imágenes, los cirujanos y las inyecciones. Estas remisiones y recomendaciones pueden ayudar en el tratamiento y la atención del dolor lumbar.
Por último, un fisioterapeuta tiene la capacidad de determinar si puede haber algo más infrecuente o grave que pueda estar contribuyendo al dolor de la lumbalgia, lo que le permitirá obtener ayuda más pronto que tarde. Ver a un fisioterapeuta es siempre una buena opción cuando se trata del tratamiento del dolor lumbar.